La publicidad digital es una acción de marketing que consiste en promocionar una marca, un producto o un servicio en Internet. Utiliza terminales digitales como ordenadores, teléfonos inteligentes y tabletas para llegar a los usuarios de Internet y móviles. Por ejemplo, un comercializador utiliza varios canales digitales para difundir anuncios promocionales. En lugar de periódicos, revistas o vallas publicitarias, los anuncios son visibles en los motores de búsqueda y las redes sociales.
Resumen de los tipos de publicaciones electrónicas
En el caso de la publicidad online y móvil, los anunciantes pueden elegir entre diferentes posibilidades. Aunque Google y Facebook parecen acaparar una parte importante de los ingresos publicitarios, existen infinidad de soluciones para ganar visibilidad en Internet. Veamos los formatos más comunes.
Búsqueda o ASP
La publicidad en buscadores o SEA (Search Engine Advertising) consiste en comprar palabras clave para aparecer en los primeros resultados de los buscadores. El enlace al sitio web va precedido de la palabra "anuncio". Estamos hablando de enlaces comerciales y de referencias pagadas. Esta estrategia se despliega principalmente en el comercio electrónico. La búsqueda es apreciada por el hecho de que da la posibilidad de personalizar el anuncio. En efecto, puede añadir información adicional sobre el anuncio: dirección, número de teléfono, precio, etc.
En Google, la búsqueda se realiza en una interfaz llamada Google Adwords. Esta plataforma de referenciación de pago ofrece a los anunciantes un sistema de pujas por palabras clave. Así, el anunciante define un coste por clic o CPC que paga a la red publicitaria de Google cada vez que un usuario hace clic en su anuncio.
La ventaja de los anuncios de Google es que se dirigen a personas que ya están interesadas en la oferta propuesta por su empresa. En efecto, estos internautas están investigando una necesidad que su anuncio puede resolver.
Al contrario que la referenciación natural, la búsqueda es especialmente interesante para lanzar campañas publicitarias durante un periodo de tiempo limitado.
Publicidad en pantalla
La publicidad gráfica es un conjunto de elementos gráficos que se muestran en sitios web, blogs y aplicaciones móviles. Las pantallas pueden ser banners, ventanas emergentes, un vídeo que enlaza con el sitio web del anunciante. La pantalla es interesante para crear tráfico durante un período especial o para comunicar un mensaje fuerte. Puede elegir entre dos formas de mostrar una pantalla. O bien deja que Google lo muestre en sus sitios asociados cuyo contenido es coherente con la oferta. O bien usted mismo elige las páginas en las que aparecerá. Muchos editores monetizan sus sitios web mediante la comercialización de espacios publicitarios dedicados a las pantallas. Puedes ponerte en contacto directo con ellos.
En los últimos años, el mercado de la visualización ha estado marcado por el auge de la programación. Esta tecnología automatiza la compra de espacios publicitarios. Para ello, la visualización programática hace referencia a los datos que permiten a los anunciantes dirigirse a un público relevante en el momento adecuado.
La publicidad programática se divide en dos categorías: el display programático clásico y el Real Time Biddind o RTB. La visualización programática consiste en reservar espacios publicitarios por adelantado a un precio fijo. El RTB, por su parte, se basa en un sistema de subasta en tiempo real. El espacio publicitario de los expositores se destina a los mejores postores.
Los anuncios en las redes sociales
Los Social Media Ads difunden anuncios en redes sociales como Facebook, Twitter o LinkedIn. Estas plataformas utilizan los datos de los internautas para definir los criterios de segmentación: sexo, edad, situación familiar, lugar de residencia, profesión, ingresos, intereses... Esto permite a los anunciantes dirigirse a un público extremadamente preciso.
Retargeting
La reorientación muestra un mensaje de incentivo a una persona que visitó el sitio web pero se fue sin hacer una compra. Esta práctica es posible gracias a las cookies y a las tecnologías de seguimiento y almacenamiento de datos de navegación. Este retargeting tiene lugar principalmente cuando el visitante ha visto una página de producto, ha preguntado por un comparador o ha llenado un carrito de la compra. La idea es recordar al visitante la existencia de un producto para convertirlo en cliente. Es una estrategia digital muy utilizada en el comercio electrónico.
El retargeting es también una técnica de marketing digital muy utilizada para ofrecer productos complementarios. Tiene la ventaja de emitir publicidad dirigida a un público ya interesado en los productos. La tasa de conversión será entonces mayor.
Publicidad nativa
La publicidad nativa es una práctica publicitaria digital que encaja perfectamente con el contenido y la forma de un sitio web. Se integra en el corazón del contenido que trata el mismo tema que él. Como un camaleón, se funde con la decoración para no perturbar la experiencia del usuario, como ocurre con la pantalla, que se considera demasiado intrusiva.
En la red social Facebook, la publicidad nativa adopta la forma de una publicación con la mención "enlace patrocinado". En un blog, aparecerá como una entrada con la etiqueta "publicidad", mientras que en un sitio de noticias, será un artículo patrocinado.
Esta publicidad personalizada atrae a los anunciantes porque responde a los intereses del público objetivo. Genera más de la mitad de los clics que se pueden conseguir en el SEO orgánico. Un estudio realizado por Oath, la entidad que fusiona Yahoo y AOL, predice que la publicidad nativa crecerá un 167% en el año 2020.
Afiliación
La afiliación es un enfoque de marketing muy sencillo. El propietario de un sitio web, llamado "afiliado", inserta en su página un enlace o una pantalla que remite a la oferta del anunciante. A cambio, recibe una comisión cada vez que un visitante hace clic en el enlace o realiza una compra. Por su parte, el anunciante aprovecha el flujo de visitantes del afiliado para encontrar una nueva audiencia.
Marketing de influencia
El marketing de influencia es una verdadera palanca para ganar visibilidad. De hecho, es muy popular entre las empresas. Un estudio realizado por Influencer Marketing Benchmark Report destaca un aumento de sus ingresos globales hasta los 6.500 millones de dólares en 2019.
El influencer es el protagonista de esta publicidad en la red. Tiene el respeto y la confianza del público y se convierte en una fuerza de propuesta para su audiencia. Utiliza diversas técnicas para presentar una marca, como la colocación de productos, el buzzing, el unboxing, los concursos, las invitaciones a eventos, el buzzing en vídeo, las series web, etc.
Los influenciadores pueden ser celebridades del cine, el deporte o la música. Tienen millones de fans que las marcas pueden utilizar para impulsar las ventas. Por otro lado, recurrir a un influencer famoso requiere un gran presupuesto. Aparte de las estrellas, también hay macro y microinfluenciadores que tienen entre decenas de miles y millones de seguidores en Facebook o Twitter. Los nanoinfluenciadores, en cambio, tienen una pequeña comunidad unida por una pasión compartida. Esto promete un fuerte compromiso de los objetivos. Esta categoría de influencers es ideal para trabajar en un nicho de mercado.
Según un estudio realizado en 2019, la publicidad en internet crece un 12% y canibaliza 5.860 millones de euros. Esta es la prueba de que los profesionales del marketing se orientan cada vez más hacia esta tendencia, así que ¿por qué no lo haces tú?